A CAPELLA Por MAURICIO HERNÁNDEZ OLAIZ

Evidencia.
Ya que algunos no dejan de lado el interés electoral pese a la pandemia de Covid 19, que siguen preocupados por mover por donde puedan las encuestas patito y gansito que los ponen en los cuerno de luna en las preferencias, vale la pena recuperar algunos comentarios que he hecho en este espacio en ocasiones anteriores.
La mayoría de los personajes que quiere ocupar un puesto de mayor peso en la elección del año entrante, utilizan cualquier pretexto, incluso al coronavirus, para sacar raja política. Pero como he manifestado en esta columna la mejor evidencia es su propio desempeño en su actual encargo. La mayoría claramente no queda bien parado.
Pero, tal vez, la que más llama la atención es aquella que busca el puesto más representativo, la silla ejecutiva. Ya sabemos que Lorena Cuéllar aspira a ser la gobernadora, sin embargo, su actuación al frente de la delegación del Bienestar no ha sido la más brillante, ni siquiera efectiva, mucho menos relevante.
Y es que la evidencia es más clara que el agua. Al interior de la delegación del Bienestar hay un verdadero desmadre. Nadie sabe nada pero todos hacen como que saben de todo, los programas se entregan a destiempo y en condiciones negligentes. Pese al huracán de críticas en medios y redes sociales, la súper delegada mantiene la estrategia valiéndole una hectárea de chorizo lo que digan o piensen los demás. Su personal de confianza se siente sublime y docto en la materia, y en poco ayudan a la arrogante delegada.
La mejor muestra del desorden al interior de la oficina tuvo verificativo hace unos días. La sagaz Blanca Estela César se aventó la puntada de manifestar abiertamente; y hay un video que lo demuestra, que los apoyos a micros y pequeñas empresas ya se habían acabado, se terminaron, no hay. Solo unas horas antes el presidente atolero había dado a conocer estos créditos, pero en Tlaxcala ya se habían terminado.
Es claro que la servidora de la nación no tenía ni la más remota idea, ni del anuncio de su jefe máximo, ni de dicho programa, pero pese a su supina ignorancia salió a negar, tajante, su vigencia. Cero comunicación, organización al interior de la dependencia federal. La mejor evidencia de lo anterior es que al día siguiente los chavos del “Bienestar” salieron a dar una “rueda de prensa” para decir, palabras más o menos…qué los apoyos si se van a dar pero que no tenían ni idea ni cuándo ni de a como…no pos valiente rueda de prensa…Solo lo hicieron para tratar de tapar la torpeza, impericia, incompetencia , y todos sus sinónimos, de Blanca Estela.
Lo anterior solo es una pequeña cucharada del atroz estilo de administrar de la titular. La mejor evidencia de su desempeño para el futuro electoral es lo que hace hoy en día, como se desempeña actualmente. ¿Si no puede administrar y organizar debidamente a la delegación del Bienestar, como podrá organizar, administrar y gobernar todo un estado.?
Tiene muchas ganas…sin duda, tiene mucho dinero….también…pero eso no la capacita para una responsabilidad de tal envergadura y menos con las recientes muestras de arrogancia, poca tolerancia y mal manejo de personal.
Pues es precisamente su personal, su gente, los chavos del bienestar quienes han filtrado a los medios las chambonadas de la titular y corifeos que le acompañan. Es su propia gente la que se encuentra mas indignada con su mala administración.
Pero así como hay personal inconforme, existen sus penosos seguidores. Esos que se vuelcan en las redes para tratar de defender lo indefendible, esos que atacan sin miramiento a aquellos que escriben, documentan, reportean las pifias y excesos de la ahora mal llamada virreina.
Sin argumentos sólidos tan solo denostación, arremeten con todo y con todos. Se quejan de la especulación, pero especulan, se lamentan de la desinformación pero desinforman, se creen dueños de la verdad y la pureza de su jefa. Así es amable lector, también existen lo Lore Zombies, tan solo instruidos en desmentir la veracidad y ensuciar al periodismo, si este no comulga o aplaude las virtudes de Lorena Cuéllar.
Al grado que niega algo que es la sustancia del periodismo, la evidencia. A menos claro que sea la fabricada por ellos.
Si Lorena Cuellar quiere mostrar que tiene los tamaños para gobernar el estado, se tiene que aplicar urgentemente en ordenar su delegación, de lo contrario, por lo menos para un servidor quedará evidenciado que no tiene la capacidad para hacerlo, al igual que su pobre actuación como administradora del ayuntamiento capitalino, su paso por el Bienestar ha sido de más oscuros que claros….Tal vez debería recordar sus tiempos al frente del centro vacacional donde no lo hizo nada mal.
Pero no es lo mismo un estado que un hotel con alberca, o una delegación, que también vale la pena reconocer, viene hecha un desmadre desde su oficina central. La secretaria María Luisa Albores también anda hecha bolas con tanto apoyo que dispara a diestra y siniestra el presidente en las mañaneras. Claramente las directrices se han perdido. Debe ser muy complicado trabajar con López Obrador.
A final de cuentas la evidencia es la madre de todas las encuestas.
En sus marcas…listos…con tocho Lore Bots.
@olaizmau