A CAPELLA Por MAURICIO HERNÁNDEZ OLAIZ
Pre campañas
Se comienza a calentar la sucesión gubernamental. Los distintos bandos comienzan a mostrar algunas de sus armas y a evidenciar quién estará mejor preparado para hacer campaña en pandemia.
El jaranero Saga sigue restregándole al panismo la estupidez cometida por dejarle ir, de a poco, pero sigue sumando y esos puntos en la bolsa del polémico ingeniero podrían ser la diferencia para la alianza unidos por Tlaxcala. Por lo pronto la confianza es evidente en el aspirante quién promete para marzo estar ya en el segundo puesto y que por ningún motivo negociará su aspiración. Saga es bueno para prometer, aunque como diputado evidenció ser muy malo para cumplir.
Anabell Ávalos ha golpeado con asertividad el tablero electoral. La unidad de la alianza a favor de su candidatura es unánime e incuestionable. La estrategia de recolectar videos de personajes de peso político nacional de todas las fuerzas que le acompañan fue un acierto y el nombrar a Minerva Hernández su coordinadora de campaña de reconocimiento. Pocas mentes financieras existen como la de la senadora, quien, en ese rubro y en otros, será una adhesión vital para la estrategia de los de unidos por Tlaxcala, e incluso, para el probable futuro éxito del gobierno.
Mientras que en la coalición juntos haremos historia en Tlaxcala, se esfuerzan con todo en presumir unidad. Pero se desgastan en vano y pierden energía en un aspecto que a todas luces está roto. En Morena no va a haber unidad, ni hoy, ni mañana, ni en la campaña, punto. Lorena se quiere comer todo el pastel, pues haber si no acaba empachándose.
Lo que es evidente es que no están, en esa coalición, más unidos que nunca. Una muestra, otra de tantas y tantas y tantas es la declaración del “líder” bien entrecomillado del partido verde, Piñón, luego de la reunión que sostuvo la defensora con los otros partidos de su coalición.
La menudita aspirante parece no haber aprendido de errores del pasado y está comenzando a repetir acciones que abonaron a su derrota en el 2016. En su primera y harto improvisada rueda de prensa “a distancia” se le fue encima al gobernador Mena, a quién le exigió sacar las manos del proceso. Recuerdo cuando hizo lo mismo en la anterior campaña, todos los días golpeaba al entonces mandatario González Zarur, no le salió y menos cuando sacó una foto abrazada con el entonces gobernador de Morelos, Graco Ramírez, de risa. Acusaba de corrupto al mandatario de su tierra abrazando al todavía más corrupto mandatario de una tierra vecina.
Lorena no ha podido olvidar su derrota anterior y sigue pretextando que se la robaron, por lo que en sus espacios oficiales ya empiezan a cuestionar a todo lo que parezca un intento por volverle a afanar la elección. Todavía ni empieza la campaña y ya buscan excusas.
Así es en campaña Lore, quién comenzó criticando la conformación de la alianza entre PRI,PAN y PRD cuando hace media hora representó a esos institutos, otro hierro. Además, cuestionando acciones de las cuáles ella también ha sido sumamente cuestionada.
Pero lo más ridículo es el esfuerzo de su equipo en tratar de validar su propia candidatura, de hacer lo necesario para legitimar un muy dudoso proceso de selección en morena. Tampoco hay de otra, o muestran la famosa encuesta tan cacareada llevada a cabo por el partido y el cruce de datos o a nadie le van a quitar la idea de que fue todo un dedazo, una imposición, eso que tanto critican en su pueril propaganda con fotos del pasado, de una de tantas campañas de Cuéllar Cisneros.
Pero lo de la falsa encuesta y las malas maneras, mañas y demás estupideces de Mario Delgado para designar a los cuates a las candidaturas de peso, a quién más daño ha hecho es a la propia Lorena. Si morena en verdad hubiera hecho un estudio demoscópico serio, profesional, para definir a su defensora de la 4T, Lorena la hubiera ganado de calle, por paliza. Instrumento que también hubiese servido como herramienta electoral para cacarearlo por todo el estado, y con ello hoy nadie pondría en tela de juicio su aspiración y chance morena no estuviera tan dividido.
Pero sintieron pasos, presión, se pusieron nerviosos y cometieron otra de tantas pifias.
Para rematar, la entrevista en Heraldo de México…Ahora resulta que Lorena Cuéllar fue víctima de ATENTADOS…DE ATENTADOS….DEFINAMOS…Dice ella atentados, entonces no fue uno sino varios…varios..ay caramba diría Bart Simpson.
Atentado: Según el diccionario de la lengua española se define como una “Agresión contra la vida o la integridad física de una persona”…
En la entrevista con el medio nacional Cuéllar Cisneros dice “Yo sufrí de atentados, de situaciones muy dolorosas, muy feas, por eso tenemos que ponerle un alto a la violencia política de género y a la violencia en los hogares.”
Espero que en verdad sea cierto, y no por desearle mal alguno, al contrario, sino porque sería muy bajo, muy ruin utilizar un tema tan delicado y preocupante para victimizarse como mera y burda estrategia electoral.
Estaremos a la espera de las denuncias o por lo menos información más contundente sobre los atentados en contra de su vida.
De no ser así…imposible no sumarlo a los múltiples y constantes hierros por parte de su flamante equipo y de ella misma…
Sobre Viviana Barbosa, la otra aspirante ya asignada para el juego, que podemos decir, de risa. Que alguien le explique que es una contienda electoral por la silla ejecutiva, no un concurso para designar a la presidenta del Tupperware. Apenas va empezando esto, pero sin duda, es la contendiente más verde que he visto en muchos años.
Se calienta el proceso, mucho más habrá para comentar de aquí en adelante.
@olaizmau