Análisis en Contraste Por Edgar Salazar Macías - Linea de Contraste

Análisis en Contraste Por Edgar Salazar Macías

  1. REFORMA AL PODER JUDICIAL, Parte I
  2. Este pequeño artículo formará parte de una serie indeterminada de artículos en los que pretenderé dar una perspectiva, muy personal, de la reforma que se pretende hacer al Pode judicial debiendo tomarse en cuenta que no milito en ningún partido político, que no me veo beneficiado de la actual conformación del Poder Judicial, y principalmente, que el único interés de por medio es el de generar un diálogo abierto, informado y sustentado de la reforma que está por venir.

Habiendo dicho lo anterior, intentaré abarcar los conceptos básicos que se manejan dentro de la pretendida reforma. Repetir una mentira o una falacia hasta que se vuelva una verdad colectiva, o hasta que, al menos, las voces que la cuestionan pierdan estridencia entre los gritos, vociferaciones y repeticiones insulsas, parece ser la mejor estrategia para difundir los supuestos beneficios y la necesidad de realizar una reforma total al Poder Judicial.

Pero ¿por dónde empezar a entender esta cuestión?, considero que el punto de partida debe ser el concepto de pueblo. Apropiarse del concepto de pueblo para referirlo a un grupo poblacional en específico resulta una buena forma de propaganda política y de conexión con los que se asumen como pueblo, y en este caso, al usar la palabra pueblo se hace referencia a quienes se encuentran en un decil de pobreza, aunque en realidad, todos somos pueblo, ya que pueblo refiere a todos los habitantes del país, sin importar la situación económica. A los estudiantes de Derecho, en el primer semestre se nos enseña que el pueblo es una parte integrante del Estado, lo que mañosamente se omite en los discursos, y éstos se dirigen a la base del electorado del partido en el poder.

Habiendo señalado que el pueblo somos todos, entonces podemos pasar al siguiente concepto que es la soberanía. Existen diversas interpretaciones de en quién reside la soberanía, una con la que no estoy de acuerdo, es la de Arteaga Nava, y que es recogida por el partido en el gobierno, que establece que la soberanía reside en el pueblo y que éste puede hacer y deshacer, porque en él reside la soberanía; sin embargo, una interpretación con la que estoy más de acuerdo es aquella en la que la soberanía, si bien le pertenece al pueblo, éste decide que la soberanía resida en los poderes constituidos, como representantes del pueblo, lo que en palabras sencillas es, para realizar cambios sustanciales, se deben hacer a través de los poderes de la unión.

Pensemos que efectivamente el pueblo ejerce su soberanía de manera directa, y que la mejor forma de demostrarlo fue con las elecciones, y que al elegir a la que será nuestra Presidenta, también se votó y se está de acuerdo con todas las propuestas a raja tabla, o son todas o es ninguna, pero como la eligieron, entonces son todas. Entonces estamos ante una cuestión interesante, 36 millones de votos determinaron que “el pueblo” quiere que se lleve a cabo una reforma, sin consultar a los otros integrantes del pueblo, es decir, pretenden mayoritear, y no abrir al dialogo algo tan relevante como la reforma por venir.

Finalmente, en este artículo trataré de explicar que no existe un solo Poder Judicial, sino que existe el Poder Judicial de la Federación, y los Poderes Judiciales locales (estatales), que son entes distintos y no existe una jerarquía entre los mismos. En términos simples y generales, el Poder Judicial de la Federación se integra por Jueces de Distrito, Magistrados de Circuito y Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, encargándose de resolver juicios penales de delitos federales, amparos, controversias constitucionales, acciones de inconstitucionalidad, generando jurisprudencias, siendo los interpretes de la Constitución y las leyes; por otra parte, los poderes judiciales locales se integran por jueces y magistrados, que son los que conocen la mayoría de asuntos en materia civil, familiar, penal, mercantil, es decir, la justicia del día a día.

Es importante hacer esa distinción porque se habla mayormente de la reforma que afectará al Poder Judicial federal, pero se está pasando por alto que la reforma afectará también a los poderes judiciales locales.

TRES PUNTOS…

Hay mucho por reflexionar de esta reforma que se hará, y pareciera que debemos forzar el debate y el diálogo, porque, como dijo la Ministra Presidenta, no por sacar la reforma rápido, se pase por alto la oportunidad de hacer una reforma adecuada, y que traiga realmente los beneficios que se pretenden. Es cuanto.