“Para regreso a clases tenía hasta 20 empleados en la papelería, hoy solo 5” 

Oscar Solís Chávez, propietario de reconocida papelería en Chiautempan, estima una caída en las ventas de hasta el 70 por ciento debido al regreso a clases no presenciales en el próximo curso 2020 – 2021. 

Tlaxcala, Tlax, 12 de agosto de 2020 (Gerardo Santillán).- Propietario de una de las papelerías más grandes y surtidas de la ciudad de Chiautempan, Oscar Solís Chávez ha experimentado un fuerte golpe en sus ventas por la pandemia Covid 19, particularmente ahora por el regreso a clases pero de manera virtual, en que los estudiantes necesitarán menos artículos para estudiar a la distancia.

De hecho, estimó que las ventas tendrán una caída del 70 por ciento de cara al inicio del ciclo escolar 2020 – 2021 el próximo 24 de agosto, ante la ausencia de padres de familia y estudiantes para surtir sus listas de útiles de cada curso y la adquisición en general de más de 4 mil 500 artículos en inventario.

“A estas alturas ya teníamos filas de personas esperando surtir sus listas. En donde podemos ver el mayor impacto a la economía de las papelerías es que por el regreso a clases teníamos de 15 a 20 personas que nos apoyaban en la tienda, ahora solo tenemos cinco empleados prácticamente desde el inicio del año, entonces también en el empleo observamos el decremento porque si no hay gente ni ventas, no podemos nosotros contratar más personal”, indicó en entrevista.

Estimó que todo el sector de papelerías en el país, el Estado y el municipio tendrá efectos negativos por el regreso a clases no presenciales, pues ahora los niños y adolescentes cambiarán el lápiz, libreta y goma por computadoras, tabletas, teléfonos celulares y televisión, sobre todo prescindirán de material de apoyo que comúnmente se venden en esos establecimientos comerciales “de la esquina”.

“Lo que hemos visto es que por ejemplo no han venido a comprar toda la lista, pero sí han venido a adquirir lo mínimo necesario para trabajar desde casa, entonces lo que han hecho los papás es comprar útiles de mayor calidad porque ahora ellos los cuidarán y no los niños, es decir, no se están yendo tanto al volumen y sí a la calidad, pero claro que hay una merma en la economía de este sector, pero esperemos que salgamos pronto de esto”, abundó.

No obstante, Solís Chávez consideró que por un lado las papelerías deben adaptarse a las nuevas condiciones y aprovechar las tecnologías de información y comunicación para vender en línea, hacer esfuerzos por tener ofertas, pero además, diversificar sus servicios; empero, reconoció que quienes la tendrán más difícil serán aquellos comerciantes que tienen su negocio en las inmediaciones de las escuelas y que rentan el espacio, por lo que hizo votos en que la ciudadanía prefiera consumir en los negocios locales para reactivar la economía de abajo.