RÉQUIEM POR UN ESTADO CONSTITUCIONAL Por José Ramón González Chávez - Linea de Contraste

RÉQUIEM POR UN ESTADO CONSTITUCIONAL Por José Ramón González Chávez

El pasado 10 de septiembre, en un inmueble que no es aquel en el que debería regularmente sesionar, la legislatura vigente de la cámara de senadores llevó a cabo una ópera bufa, surrealista, que llegó a su colmo con el episodio del ex presidente municipal de Boca del Río, diputado local, ex candidato a gobernador, senador, siempre por el PAN y siempre por Veracruz y ahora sorprendentemente morenista Miguel Angel Yunes Márquez para dar legalidad –que no legitimidad- a un acto de venganza desde el poder a los ministros y magistrados que defendiendo la Constitución en diferentes momentos han rechazado algunos de los instrumentos legales emblemáticos del régimen aprobados por el legislativo.

Después de que su papá y suplente en el escaño, violando todos los procedimientos legislativos del caso, asumiera como titular no sin antes hace una apología mentirosa de su hijo bajo el argumento de que éste tenía una incapacidad física que le impedía desempeñar el cargo y luego sorprendentemente, como si fuera parte de un acto de opereta pueblerina, apareció en el pleno bueno y sano y leyó un discurso, que por supuesto no hizo ya que no es capaz de articular por sí mismo dos renglones, mediante el cual dio su voto a favor de la reforma, el bloque en el poder logró la aprobación en lo general y particular de una iniciativa que no conlleva ningún proceso real de reforma salvo la demolición del poder judicial para quedar junto con el Congreso de la Unión en manos del ejecutivo, demoliendo de tal suerte el principio de separación de poderes, y en consecuencia del Estado Constitucional, constituyendo a todas luces un golpe de Estado desde el Ejecutivo.

Cabe mencionar que semanas antes el Morena ya había presentado ante el Tribunal federal electoral (TEPJF) un recurso para evitar que Yunes Márquez tomara posesión de su escaño, por ser prófugo de la justicia al tener una orden de aprehensión girada por la fiscalía de Veracruz una ficha roja de la Interpol por falsificación de documentos, pero que fue rechazado por ese órgano jurisdiccional. Pero ahora resulto que no solo tomo posesión de su cargo sino que se pasó a la fracción de Morena (que alguien me explique) y no solo eso sino que fue quien con su voto dio el triunfo a la propuesta del bloque oficialista.

Ante tal espectáculo y siendo abogado especialista en Derecho Constitucional y Derecho Legislativo, surgen en lo personal preguntas cruciales sombre mi destino profesional como profesor, investigador, escritor, periodista jurídico y hasta como abogado: ¿Qué les voy a enseñar a mis estudiantes de postgrado de Teoría del Estado Constitucional? ¿Con qué cara voy a exponer qué es el Estado, qué es el Derecho, qué es la Constitución, que es el poder público, qué son los poderes, los derechos fundamentales, para qué sirven, como operan, cómo interactúan? Qué responder si alguien me increpa argumentando que eso no existe, que aquí se hace lo que sea, estando encaramado en el poder?

Y como periodista jurídico, a usted mi querido y único lector, qué le digo del deber ser confrontado con la realidad donde aquel se viene abajo por esta vorágine de ideas y acciones que por donde se les vea carecen de racionalidad, de sustentohttps://hgrupoeditorial.com/category/editorial/ procedimental y técnico.

Como me dijo un alumno hace rato, en lugar de pensar abrir un bufete jurídico, creo que me dedicará a abrir un bufete gastronómico, creo que en estas épocas será más provechoso para mí y mis comensales.

No se extrañe pues si esta resulte quizá la última –o la penúltima- de mis columnas. Que más hacer si el Estado Constitucional esta, como dicen los leguleyos, en artículo mortis…