SIN FILIAS Y SIN FOBIAS Por JOSÉ JACINTO VEGA
El tobogán de Claudia
La sucesión de eventos acaecidos en el sistema de transporte de la Ciudad de México, popularmente conocido como “metro”, sean por falta de presupuesto para mantenimiento, o por “sabotaje” como pretende la jefa del gobierno capitalino hacerlos aparecer, empiezan a tener efecto negativo en el posicionamiento de la doctora Sheinbaum con miras a su aspiración presidencial; en una medición publicada en la presente semana por un medio nacional, que periódicamente da seguimiento a la carrera por la presidencia de la República, se observa la pérdida de puntos porcentuales de esta, en cuanto a quienes la prefieren como candidata, lo que hizo que Doña Claudia retrocediera tanto, que casi está empatada con el canciller Marcelo Ebrard, lo que no son buenas noticias para la nueva mafia del poder que encabeza Don Andrés.
Si bien a Ebrard lo han considerado como parte de la cofradía de las “corcholatas morenas”, este, no es ni por tantito quien quisiera López Obrador como su sucesor, ya que duda, y con razón, que pudiera manipularle para seguir gobernando a través de él, como sí lo haría con Claudia Sheinbaum o Adán Augusto López Hernández, a quien sigilosamente se le ha ido empujando para ser el “plan B”, por si Doña Claudia revienta políticamente en la carrera, cosa que no se ve lejana; sin embargo, aún y cuando Don Adán ha crecido moderadamente en las encuestas, difícilmente se pondrá al nivel de Don Marcelo, lo que pondría a López Obrador en la disyuntiva de tener que despedazarlo políticamente para que Hernández López lo pudiese rebasar.
Argumentos para “tronar” a Ebrard los tendría el jefe de la 4T, simplemente con que deje correr todo lo acumulado en contra de él por los asuntos del “metro”, bastaría para hacerlo desistir o aniquilarlo, aunque con ello seguramente estaría entregando el gobierno de la Ciudad de México a la oposición, y con ello, abriendo la puerta a la posterior derrota presidencial.
Don Andrés se ha caracterizado por su cuestionable aprecio por las mujeres, tanto sobre las que incorporó a su gabinete, a quienes les ha dado un papel mayormente ornamental, como a las que son parte de la lucha feminista que tanto le incomodan, por ello, no será de extrañar que llegado el momento sacrifique a Doña Claudia con tal de encumbrar a su auténtico proyecto sucesorio, su paisano Don Adán.