SIN LÍNEA Por HORACIO GONZÁLEZ
Semana crucial
Será esta semana cuando el Congreso del estado apruebe la reforma que servirá de base para regular el proceso electoral local que inicia el próximo 29 de noviembre. Dependerá de las propuestas que se incluyan si ésta tiene éxito o fracasa. Lo cierto es que en los partidos políticos existe preocupación por lo que puedan aprobar los diputados y las diputadas locales.
Es un hecho que no habrá reforma constitucional, pero es muy probable que sí la haya en las leyes secundarias. Y si la iniciativa que sea aprobada por el pleno legislativo tiene el visto bueno de las dirigencias de los partidos políticos, entonces habrá un nuevo marco legal aunque sea con mínimas modificaciones.
La lentitud y la negligencia con la que se ha conducido la diputada petista Irma Yordana Garay Loredo, presidenta de la Comisión de Asuntos Electorales del Congreso local, preocupa a las dirigencias partidistas. Y la preocupación es válida a tal grado que preferirían que no haya reforma si ésta resulta desproporcionada a la realidad que hoy en día se vive por la pandemia del coronavirus.
El visto bueno de los partidos políticos es importante porque si la reforma que aprueben los integrantes de la legislatura tiene su desaprobación, es seguro que habrá impugnaciones ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) o ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Y habrá, en consecuencia, una fuerte presión hacia el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez para que la reforma no sea publicada en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado.
Si este escenario se concreta, la actual Legislatura habrá fracasado en su tarea principal y cerrará con broche de oro la incompetencia con la que se ha conducido desde que fue instalada
En esa tesitura, el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) tendrá sobre sus espaldas un peso enorme en el próximo proceso, sobre todo porque las consejeras y los consejeros no tendrán más alternativa que ir aprobando acuerdos en el camino. Y es probable que varios de esos acuerdos sean impugnados ante el Tribunal Electoral de Tlaxcala (TET).
Si bien ese es un escenario que nadie desea, es altamente probable que suceda si la actual legislatura no cumple su trabajo y lo hace bien. En los hechos, es esta la última oportunidad que tiene porque el inicio del proceso electoral federal, el próximo 7 de septiembre, hará que las posiciones partidistas se polaricen, haciendo complicada la posibilidad de llegar a acuerdos políticos.
La polarización que origina en los partidos políticos todo proceso electoral es natural y siempre se refleja en los trabajos del Congreso del estado. Eso no es nuevo. Pero si de por sí ya existe incompetencia por los desacuerdos, a esa incompetencia se sumará, irremediablemente, una mayor polarización, peor de la que ahora mismo existe.
Así que la que hoy inicia será una semana crucial. Hagamos buenos deseos porque la responsabilidad impere en nuestros diputados y diputadas locales. De no haberla, entraremos en un tobogán de incertidumbre que a nadie conviene, particularmente porque la pandemia complicará todavía más un ya complicado proceso electoral.
Lineazo: Este lunes inicia el ciclo escolar 2020-2021. Será un ciclo dificilísimo porque la pandemia del coronavirus hace que las clases se den a distancia. A pesar de los esfuerzos que la autoridad educativa ha hecho, en este espacio se ha afirmado que será un ciclo escolar perdido.
Lo peor es que la falta de condiciones tecnológicas que tienen muchas familias se verá reflejada en toda una generación. Eso es lo verdaderamente triste y lamentable.